Miguel de Cervantes Saavedra: el destino de un escritor en el contexto de una gran época
- Paravoz.es
- 28 feb
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Miguel de Cervantes Saavedra (1547-1616) fue uno de los escritores más grandes de la historia, autor de la primera novela moderna, El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha. Su vida estuvo llena de aventuras, fracasos y lucha, reflejando los dramáticos acontecimientos de la historia española y europea a finales del siglo XVI y principios del XVII.

Cervantes nació en 1547 en Alcalá de Henares, en una familia noble pero empobrecida. Su padre, Rodrigo de Cervantes, era cirujano, una profesión que en aquel entonces no garantizaba ni un alto estatus ni riqueza. Debido a dificultades económicas, su familia se trasladó frecuentemente. Es posible que Cervantes haya recibido educación en una escuela jesuita, pero no existen pruebas definitivas. Desde joven mostró talento literario y escribió poesía.
Carrera militar y cautiverio en Argel (1569-1580)
En 1569, Cervantes viajó a Italia y entró al servicio del cardenal Giulio Acquaviva. En 1571 participó en la batalla de Lepanto, una de las más importantes de la época, en la que la flota cristiana derrotó al Imperio otomano. Aunque la victoria no destruyó el poder otomano, detuvo su expansión en Europa occidental y marcó el final de la era de las galeras en la guerra naval.

Durante la batalla, Cervantes sufrió tres heridas, una de las cuales le dejó la mano izquierda inmóvil, ganándose el sobrenombre de "el manco de Lepanto".
En 1575, cuando regresaba a España, fue capturado por piratas argelinos y vendido como esclavo. Durante cinco años intentó escapar varias veces sin éxito, pero su valentía le valió el respeto tanto de sus compañeros cautivos como de sus captores.

Su liberación en 1580 fue el resultado de los esfuerzos de su familia, que reunió dinero para su rescate, y de la orden de los mercedarios, que se dedicaba a redimir cautivos cristianos. El monje Juan Gil, miembro de esta orden, llegó a Argel con el objetivo de liberar a tantos prisioneros como fuera posible. El rescate de Cervantes costó 500 escudos, una suma enorme en ese tiempo. Finalmente, en septiembre de 1580, Cervantes desembarcó en el puerto de Dénia, en el Reino de Valencia.
Su regreso no fue triunfal. A pesar de su servicio en Lepanto y su resistencia en el cautiverio, no recibió ninguna recompensa significativa por parte de la corte real. Sin embargo, sus experiencias influyeron profundamente en su obra literaria, especialmente en Las novelas ejemplares.
Vida después del cautiverio: pobreza y decepciones (1580-1604)
Cervantes intentó hacer carrera en España, pero sin éxito. Trabajó como aprovisionador del ejército y recaudador de impuestos, pero fue acusado de irregularidades financieras y encarcelado varias veces. En 1585 publicó su primera novela, La Galatea, que no tuvo éxito. Durante los siguientes 20 años, escribió teatro, poesía y novelas, pero continuó en la pobreza.
En esta época, España era poderosa, pero enfrentaba crisis. La guerra en Flandes, la derrota de la Armada Invencible y problemas económicos afectaban al país. Cervantes observaba la corrupción y la injusticia, lo que influyó en su obra.
El nacimiento de Don Quijote (1605-1615)

En 1605 se publicó la primera parte de Don Quijote, que fue un éxito inmediato. No era solo una parodia de los libros de caballerías, sino una obra filosófica sobre el choque entre los sueños y la realidad. Sin embargo, Cervantes ganó poco dinero por su obra debido a las prácticas editoriales de la época.
En 1614, un autor anónimo publicó una continuación falsa de Don Quijote. Esto enfureció a Cervantes, quien se apresuró a completar la segunda parte, publicada en 1615. Esta continuación fue aún más compleja y filosófica, consolidando su legado literario.
Años finales y muerte (1616)
En sus últimos años, Cervantes siguió escribiendo. En 1613 publicó Las novelas ejemplares y en 1616 terminó Los trabajos de Persiles y Sigismunda. El 16 de abril de 1616, sabiendo que su muerte estaba cerca, escribió el prólogo de su última obra.
Falleció el 22 de abril de 1616 en la pobreza y fue enterrado en un convento de Madrid, aunque su tumba exacta se perdió con el tiempo.
Posibles vínculos con la inteligencia española
Algunos historiadores creen que Cervantes pudo haber trabajado como espía para la corona española. Tras su liberación, viajó a Orán, supuestamente para recopilar información. También visitó Lisboa en 1582, donde se encontraba el rey Felipe II. Su trabajo como recaudador de impuestos le permitió moverse por el país, lo que pudo facilitar la recolección de datos para el gobierno. Sin embargo, no hay pruebas concluyentes de su participación en actividades de espionaje.
La época de Cervantes: guerras, crisis e intrigas
Su vida transcurrió en el contexto de eventos históricos clave:
1569-1571: Revuelta de los moriscos en Granada, batalla de Lepanto.
1580: Anexión de Portugal por España.
1585-1604: Guerra anglo-española, derrota de la Armada Invencible (1588).
1568-1648: Guerra de Flandes.
1609: Expulsión de los moriscos.
1615: Alianza dinástica entre España y Francia.
Legado
Cervantes dejó una huella imborrable en la literatura mundial. Don Quijote influenció a autores como Dostoievski, Tolstói y Flaubert. El español es llamado "la lengua de Cervantes" y el 23 de abril, fecha de su muerte, se celebra el Día Mundial del Libro.
Su vida fue una historia de lucha, perseverancia y talento. Aunque murió en la pobreza, su nombre se volvió inmortal.